No me negarán que los de El Día son unos cachondos. Según pueden comprobar en el recorte de al lado (publicado el pasado lunes día 12), el periodista (¿?) que redacta el asunto (supuestamente haciéndose eco de lo que le cuenta un conductor asustadizo), se sorprende de que la Guardia Civil haga un control con un arma colgada (entendemos, listos que somos no porque lo explique, que se refiere a un arma larga y no a la pistola), ofreciendo -dice el nota o la nota, vaiga uno a saber- "una imagen más propia de un conflicto bélico". Nosotros estamos de acuerdo con el redactor y proponemos que los controles se hagan con una pistola de agua o, a lo sumo, con una de mistos. Ahí más atrás, en el mismo periódico uno de sus popes, Andrés Cháves, se alarmaba de que asaltaran una gasolinera a tiros en Guamasa. Nada, lo dicho, una pistolita de agua o de mistos y pa'lante.
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